Si miramos a nuestro alrededor notaremos que cada vez hay más personas que superan la esperanza de vida. Y es una muy buena noticia, pues quiere decir que las condiciones sanitarias son cada vez mejores, lo mismo que la medicina preventiva y la calidad de vida de las personas a lo largo de toda su vida.
Pese a ello, hay algo que sigue siendo una constante y es la inevitable alteración de la salud de las personas mayores. Si bien muchos gozan de óptima salud durante muchos años, para algunos otros el deterioro puede ser inevitable y afectar uno o varios aspectos de su salud, como por ejemplo la audición.
Síndrome de la deprivación sensorial
En el Adulto Mayor, se le llama así a la afección total o parcial de la función visual, auditiva, gustativa u olfatoria, que además de limitar uno o más sentidos, genera disfunciones en la esfera biológica, psicológica y social, afectando la independencia y la calidad de vida del adulto.
Este síndrome se da en las personas mayores de 60 años. Y por ejemplo, un dato curioso es que, entre todas las deprivaciones sensoriales, el déficit auditivo es el que se presenta con más frecuencia.
¿Qué es la deprivación sensorial auditiva?
A medida que la edad avanza se producen cambios en el funcionamiento de todos los sentidos, es decir, de la vista, el oído o el gusto. En las personas mayores tener uno o más de un sentido limitado afecta su independencia y, obviamente, su calidad de vida.
Quizás, uno de los más comunes, o el que más se presenta; es el de la pérdida tonal, es decir, la disminución pronta o gradual de la capacidad para oír. Se da en casi un 25% de las personas entre 65 y 74 años y sufre el 50% de los mayores de 75 años.
Identificar los síntomas y tratarla a tiempo
Quizás muchos digan que al llegar a la vejez es normal perder la audición. Y, podríamos responder que sí, es normal, pero no debería debe ser así. Podemos colaborar con el adulto mayor para evitar formar parte de estos números o, al menos, cambiar los hábitos familiares para lograr integrarlo a la cotidianidad y evitar que sufra aislamiento social.
Una atención tardía a estos casos podría afectar las funciones cognitivas y modificar el estado emocional del anciano, hasta llevarlo a sufrir depresión.
Síntomas
- Amortiguación del habla y de otros sonidos
- Dificultad para comprender palabras
- Dificultad para escuchar en especial cuando se encuentra en un espacio con ruido de fondo
- Declive cognitivo por la falta de interacción con el entorno
- Problema para escuchar las consonantes
- Duelo por la pérdida auditiva
- Problemas en la conducta, personalidad y adaptación al entorno
- Depresión
- Aislamiento social
- Impotencia al no hacerse comprender ante los oyentes
- Ansiedad o fatiga
¿Qué provoca la disminución tonal?
- Daño al oído interno: Tanto el envejecimiento como la exposición a ruidos fuertes durante mucho tiempo, pueden provocar un desgaste de los vellos o de las neuronas de la cóclea que envían señales de sonido al cerebro. Esto provoca que las señales eléctricas no se transmitan con tanta eficiencia y produzcan una pérdida de la audición.
- Infecciones, bultos o tumores : Especialmente si se dan en el oído externo o medio.
- Ruidos fuertes: La exposición a sonidos fuertes puede dañar las células del oído interno.
- Acumulación gradual de cerumen. El cerumen puede bloquear el canal auditivo y evitar la conducción de las ondas sonoras. La mejor manera de mejorar la audición es eliminar esta extracción.
- Perforación de la membrana del tímpano : cualquier situación que genere un rompimiento en el tímpano, por ejemplo, la exposición a altos sonidos o el haber tenido un objeto con punta en el oído, así como infecciones mal curadas.
- La vejez : el paso del tiempo va debilitando la estructura del oído, degenerándolo.
- : puede darse cuenta que en el árbol genealógico exista una tendencia hacia la pérdida de audición.
- Medicamentos: Los medicamentos como el antibiótico gentamicina, sildenafilo (Viagra) y algunos medicamentos de quimioterapia pueden dañar el oído interno.
- Enfermedades persistentes: Las enfermedades que causan fiebre alta, como meningitis, pueden dañar la cóclea, pero también la presión arterial alta o la diabetes, que son más comunes en las personas mayores.
¿Cómo identificarla a tiempo?
Si el anciano …
- Evita ciertos entornos sociales
- Pide a las demás personas que hablen más alto, con claridad y pausado.
- Necesita de subir el volumen de la televisión o de la radio
- Evita participar en conversaciones
- Habla entre dientes
- No escucha cuando lo llaman por detrás o desde otra habitación
- Tiene dificultad para comunicarse en un grupo pequeño de personas
- Pide que le repitan las cosas una y otra vez
- Tiene dificultad para oír el timbre de la puerta o el teléfono
- Lee los labios de las personas que le hablan
- Se concentra realmente para escuchar a alguien hablar o susurrar
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Cómo integrar al anciano pese a su discapacidad auditiva
Si bien el déficit sensorial auditivo influye en la calidad de vida de los ancianos por la dificultad para comunicarse con las demás personas; no cabe duda que se puede elaborar estrategias para seguir en contacto con ellos y así evitar que caigan en picos depresivos y de ansiedad.
La tecnología es la aliada perfecta ante estos casos: desde aparatos recientes como simples pizarras, son de gran ayuda para fortalecer el vínculo y evitar queden encerrados en sus habitaciones solos con sus pensamientos.
Hacemos referencia a pequeñas acciones que permiten integrar al anciano con problemas de audición a la vida cotidiana de la familia, así como también, a la de sus efectos más próximos.
Propuestas para mantenerse comunicados a pesar del déficit auditivo
- Utilizar la opción de subtitulado que brindan los dispositivos tecnológicos, especialmente el televisor.
- Colocar una pizarra y en ella escribir esa que se le quiere decir al anciano.
- Armar cartillas con respuestas sencillas y claves ante una conversación.
- Hablar frente al adulto mayor modulando con claridad y acompañando las palabras con movimiento gestual.
- Dibujar grandes emojis que expresan sentimientos y emociones y dejárselo a la mano para cada vez que necesiten saber cómo se sienten, lo que hacen a través de ellos.
- Musicalizar todo el momento del día con música afinada en 432 Hz, esto baja la ansiedad, armonizar el cerebro y favorecer la salud emocional.
Si bien el paso del tiempo es irreversible, puede poner en práctica pequeñas acciones que favorezcan, y mantengan, la comunicación con aquel adulto mayor que esté pasando por una privación sensorial auditiva.
Lo que no debe faltar, además de las estrategias necesarias para seguir conectados; es el cariño en el trato y las demostraciones de afecto a través de caricias y abrazos. Cuidar a una persona adulta también implica evaluarlo y hacérselo saber.
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